El lunes en la mañana, Juan dejó a sus dos niños en la escuela y a su esposa Carolina en el trabajo para luego dirigirse a su oficina también. El día transcurría normal hasta que a las 11:30 de la mañana recibió una llamada de una vecina para decirle que su casa ardía en llamas.

Un incendio en el hogar puede ocurrir en cualquier momento.
La desesperación atrapó a Juan. A como pudo manejó hasta su casa. De camino llamó a su esposa para darle la mala noticia.
Ambos llegaron igual y corrieron a abrazarse, en medio de la incertidumbre y el dolor de ver su esfuerzo de años, sus sueños, sus mejores momentos familiares; convertidos en cenizas.
Ha pasado una semana y Juan y su esposa aún no se recuperan de lo sucedido. Sin embargo, una luz de esperanza empieza a alumbrar a la familia. Juan recordó que su casa estaba protegida con un seguro contra incendios y la idea de empezar de cero ya no se ve tan inalcanzable.
¿Qué es un seguro?
Un seguro se convierte en una garantía de tranquilidad y bienestar para la familia de Juan y Carolina, al ser un respaldo en este momento tan difícil.

El contrato de un seguro es conocido como Póliza.
Por medio de un contrato, llamado Póliza, el asegurado (en este caso Juan) debe realizar un pago periódico llamado Prima a cambio del compromiso de la compañía aseguradora de indemnizar o entregarle cierta cantidad de dinero para cubrir los daños del incidente ocurrido.
El ejemplo de Juan es solo una de las situaciones que podrían ocurrir. En el mercado hay seguros de vida, de gastos médicos por accidente, de enfermedad grave, de desempleo, seguros para viajar protegidos y recibir atención médica en el extranjero, los que están enfocados en bienestar, contra incendios, temblor o terremoto, entre otros.
Podemos pensar que un seguro es un gasto; sin embargo, todos estamos expuestos al riesgo y eso ya es suficiente razón para proteger nuestro patrimonio, a nuestros seres queridos y a nosotros mismos.
Gracias a nuestro equipo de indemnizaciones, Juan y su familia recibieron la oportunidad de empezar de nuevo 7 días después de su reclamo.
Si bien es cierto, fue un momento muy angustiante que impactó a Juan, Carolina y sus hijos, hoy agradecen el hecho de haber tenido un seguro contra incendios que les dio el respaldo necesario para no perder la esperanza.